Trump acude de urgencia al Tribunal Supremo para anular fallo que declaró ilegales su imposición de aranceles
La decisión final del máximo tribunal definirá el futuro de una política que ha recaudado más de US$ 210.000 millones y podría obligar al Departamento del Tesoro a realizar reembolsos masivos a las empresas importadoras, tras determinarse que el mandatario se excedió en el uso de sus poderes de para imponer las tarifas.
El gobierno estadounidense ha presentado una solicitud de urgencia ante el Tribunal Supremo para que revise el fallo emitido la semana pasada por el Tribunal de Apelación del Circuito Federal de Estados Unidos. Dicha sentencia confirmó la ilegalidad de la mayor parte de los aranceles que fueron impuestos por la administración del presidente Donald Trump.
El alto tribunal deberá ahora tomar la decisión de si admite a trámite la petición gubernamental. La Casa Blanca ha expresado su interés en que esta decisión se tome antes del próximo 10 de septiembre. En caso de que la petición sea aceptada, el calendario propuesto contempla que las alegaciones se presenten a principios de noviembre, con la vista puesta en resolver el litigio antes de que termine el año en curso.
Donald Trump se pronunció sobre esta acción legal en declaraciones a la prensa recogidas por Europa Press desde el Despacho Oval. "Vamos a acudir al Tribunal Supremo, creemos que mañana (el pasado miércoles por la noche) porque necesitamos una decisión rápida. Vamos a solicitar una resolución urgente", aseguró el mandatario.
El presidente republicano también calificó de "devastador" el escenario en que se mantenga el dictamen de la corte de apelación. Según su parecer, el tribunal consideró erróneamente que se invocó de manera indebida la Ley de Poderes Económicos de Emergencia Internacional (IEEPA) como base para la imposición de aranceles a decenas de socios comerciales de la nación.
El fallo que ahora se busca revertir fue aprobado con siete votos favorables y cuatro en contra en el Tribunal de Apelación del Circuito Federal. A pesar de la declaración de ilegalidad, la misma sentencia avaló, sin embargo, que los aranceles se mantengan con una vigencia temporal hasta el próximo 14 de octubre, mientras se completa la tramitación del caso judicial.
Esta decisión de la corte de apelaciones ratificó un dictamen previo. En primera instancia, el Tribunal de Comercio Internacional de Estados Unidos ya había determinado que Trump se había excedido en su autoridad presidencial al haber empleado la Ley de Poderes Económicos de Emergencia Internacional (IEEPA) como una herramienta para poder desplegar su política arancelaria.

Woody Allen dice que le encantaría dirigir de nuevo a Donald Trump y asegura que es "muy buen actor"
El aclamado director recordó su positiva experiencia dirigiendo al mandatario en la película "Celebrity" (1998), celebrando sus capacidades ante las cámaras y aseguró que estaría dispuesto a trabajar con él nuevamente, incluso siendo presidente.
La trama de los aranceles
La mayoría de los aranceles generalizados que Trump ha impuesto enfrentan una última prueba decisiva. Este enfrentamiento legal determinará si puede seguir aplicándolos de manera continua o si, por el contrario, las empresas afectadas son elegibles para recibir reembolsos masivos por los pagos ya efectuados.
El exmandatario había utilizado esos poderes para imponer aranceles generales a países, elevando las tasas hasta un 50 % para la India y Brasil, y hasta un 145 % para China.
Las empresas estadounidenses han pagado más de $210.000 millones de dólares hasta el 24 de agosto para cubrir los aranceles que los tribunales ahora consideran ilegales. El propio Trump reconoció el martes que la decisión, si es confirmada por la Corte Suprema, podría resultar en que el Departamento del Tesoro de EE.UU. tenga que “devolver” todos esos ingresos recaudados.
Si la Corte Suprema también determina que Donald Trump no tenía la autoridad legal para imponer estos aranceles bajo la IEEPA, el gobierno tendrá que cesar inmediatamente su recaudación. Sin embargo, aún está por verse cómo se manejarían los posibles reembolsos, abriendo la puerta a distintos escenarios para la devolución de los fondos.
Según el medio norteamericano, una posibilidad es que la Casa Blanca decida reembolsar a todos los importadores que pagaron los aranceles invalidados. Otra opción es que sostenga que el fallo solo aplica a los demandantes, lo que requeriría que otros importadores presenten su propia demanda.
Si bien las empresas esperan un reembolso por los aranceles pagados, esto no sería necesariamente una victoria. Los ingresos recaudados por el Departamento del Tesoro han significado que el gobierno ha pedido prestado menos dinero. Revertir los aranceles requerirá más endeudamiento, lo que podría implicar la venta de más bonos del Tesoro y elevar los costos de endeudamiento.
¿Qué son los aranceles y por qué los usó Trump?
Los aranceles son, en esencia, impuestos que se cobran sobre bienes comprados en otros países y normalmente se aplican como un porcentaje del valor de un producto. Por ejemplo, un arancel del 10% sobre un producto de $10 añade un impuesto de $1, elevando el costo total a $11 para la empresa importadora, la cual tiene la obligación de pagar dicho impuesto al gobierno de Estados Unidos.
Tal como reveló la BBC, el principal argumento de Trump para utilizar los aranceles es que alentarán a los consumidores a comprar más productos fabricados en Estados Unidos, lo que a su vez aumentará la cantidad de impuestos recaudados e impulsará la inversión nacional. Su objetivo principal es reducir la brecha entre el valor de los bienes que Estados Unidos compra y los que vende, conocida como déficit comercial.
Para justificar su política, el magnate sostiene que Estados Unidos ha sido aprovechado por "tramposos" y "saqueado" por extranjeros a través de acuerdos comerciales desfavorables. Por ello, el presidente ha anunciado diferentes aranceles dirigidos tanto a bienes específicos como a las importaciones procedentes de países individuales, buscando revertir esta situación que considera perjudicial.
Sin embargo, muchos de los aranceles anunciados han sido posteriormente modificados, retrasados o incluso cancelados por completo. Esto ha llevado a que los críticos acusen a Trump de utilizar declaraciones políticas dramáticas y a veces contradictorias principalmente como una táctica de negociación, con el fin de presionar a los socios comerciales para que acepten acuerdos que beneficien a Estados Unidos.