Pablo Stefanoni y el auge de la extrema derecha en Latinoamérica: “Quizás ahora no sea el momento para Chile”

En el marco del cierre del Festival Democracia, que congregó a figuras como Michelle Bachelet y Joseph Stiglitz, el sociólogo argentino Pablo Semán y el historiador Pablo Stefanoni analizaron junto a Turno AM el ascenso de la ultraderecha en la región. Los expertos abordaron las similitudes y diferencias entre los fenómenos de Milei y Bolsonaro con el escenario chileno.

22-07-2025

Este martes 22 de julio concluye el Festival Democracia, una iniciativa que se desarrolló en paralelo a la cumbre internacional "Democracia Siempre", la cual fue encabezada por el Presidente Gabriel Boric y congregó en Chile a importantes mandatarios de izquierda, entre ellos Luiz Inácio Lula da Silva de Brasil, Pedro Sánchez de España, Yamandú Orsi de Uruguay y Gustavo Petro de Colombia.


El festival fue organizado por un conjunto de fundaciones ligadas al oficialismo, como Horizonte Ciudadano, Rumbo Colectivo, Nodo XXI e Instituto Igualdad. La instancia incluyó la participación de destacadas figuras políticas nacionales, como la ex presidenta Michelle Bachelet, quien lideró un seminario junto a la directora regional de IDEA Internacional, Marcela Ríos, y la académica Daniela Campello, abordando las amenazas y estrategias a futuro para la democracia.


El evento se caracterizó además por la fuerte presencia de intelectuales de renombre mundial. Entre los expositores destacaron el premio Nobel de economía Joseph Stiglitz, el economista surcoreano Ha-Joon Chang, los filósofos Susan Neiman y Daniel Innerarity y la investigadora en desinformación digital Anya Schiffrin.


En el evento también estuvo presente el reconocido sociólogo argentino, Pablo Semán y el historiador y jefe de redacción de la revista Nueva Sociedad, Pablo Stefanoni, quienes llegaron hasta los estudios de Turno AM para reflexionar en torno a los desafíos del progresismo y los actuales escenarios políticos del mundo, donde se ha abierto espacio la ultraderecha.

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Ultraderechas en Latinoamérica


Ambos pensadores se refirieron al ascenso de la extrema derecha en Sudamérica, aludiendo a los casos de Brasil, con Jair Bolsonaro, y Argentina, con Javier Milei, considerando las posibilidades de que dicho escenario se repita en Chile luego de las elecciones presidenciales de noviembre.


"Los brasileños pensaron que no podía haber un Bolsonaro en Brasil, los argentinos hasta cierto momento previo a las elecciones, hace unos años era inimaginable una figura así, pero creo que quizás ahora no sea el momento para Chile y todavía no haya un Milei, sino un Kast. Quizás ese estilo tan provocador de Milei genere rechazo en la sociedad chilena por ahora, según dicen algunos analistas con los que hablé", planteó al respecto Stefanoni.


En tanto, Semán planteó que el fenómeno de Milei en el país vecino "precedió a Milei porque entonces había un lenguaje emergente en la sociedad, el que era muy crítico del Estado, de la economía existente hasta ese momento y de la dirigencia política, entonces lo que se empezó a decir era que Milei canalizaba, sintonizaba, impactaba, servía como pantalla de proyección para eso que preexistía".


Además, para Stefanoni el caso es distinto en Chile, ya que "en este contexto posdemocrático donde hubo un consenso progresista, hablar de Pinochet puede sonar transgresor", apelando a la cultura pinochetista que predomina en algunos sectores de la derecha contemporánea y que responden a los discursos de figuras como José Antonio Kast ya que "acá (en Chile) en la derecha todavía hay un punto con la dictadura, una huella".


"Creo que todas las derechas tienen en común, en Europa y en América Latina, una crisis, lo que Martin Gurry llamó 'la crisis de autoridad en el nuevo milenio', digamos un rechazo a las élites en un sentido ampliado. Hay crisis de los partidos, del periodismo, de los medios, de los intelectuales. Hay una crisis de un sector de las élites políticas y culturales. En general estas derechas yo creo que canalizan un inconformismo social contra eso", detalló el socio´logo.


El rol de las iglesias evangélicas


Ambos intelectuales también se refirieron al papel que juegan las entidades religiosas evangélicas en la instalación de los discursos de ultraderecha dentro de Latinoamérica, planteando que han sido determinantes a la hora de sumar fuerzas dentro de ciertos sectores populares.


"Hay un problema para las izquierdas latinoamericanas que son los evangélicos. Ese problema es hay procesos de transformación cultural, sociodemográficos de largo plazo que son irreductibles. Uno de ellos es que América Latina va a tener 35 o 40 por ciento evangélicos que la mayor parte pertenece a los sectores populares", planteó Semán.


En esa línea, el académico señaló que "las izquierdas tendrán que ver cómo hacen para construir sus mayorías que además tienen que estar ancladas en los sectores populares con los evangélicos. Una vez que la izquierda se pregunte eso, habremos dado un gran paso. Las fuerzas de izquierda y las fuerzas democráticas".


Sin embargo, el experto planteó que la influencia de la comunidad evangélica no necesariamente se refleja en las urnas, ya que "la mayor parte de la población evangélica se congrega en muy pequeñas iglesias y no siguen a uno. Diez pastores pueden decir votemos a tal y otros van a decir votemos a tal. No está comprobado que haya voto evangélico salvo y por un momento en Brasil donde el voto evangélico fue discontinuo y heterogéneo".


"Yo entiendo que la izquierda le tiene asco a la religión y más a una religión como la evangélica que está viendo a Dios todo el tiempo y la izquierda no quiere hablar de eso. Pero eso no puede ser la guía de la discusión en un proceso político que es construcción de hegemonía", advirtió.

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