Ojo con el Doctor File: el “Salfate mino” llega al Parlamento

El Doctor File es un excelente performer. Hermano de la recordada actriz Ángela Contreras, fue bendecido al igual que ella con una notable presencia física, por la cual fue conocido en su momento como el “Salfate mino”, o como dijo alguien en el Whatsapp de Turno, “Salfate en el cuerpo de Camiroaga”. Es varonil, fachero, con labia, buen "hablamiento", buen terno, buen perfume y buen shampoo. Además, es un muy buen contador de historias, quizás uno de los mejores de Chile: ameno, entretenido, interesante y sumamente convincente. El histórico hombre de televisión Sergio Riesenberg le prendió muchas velas, y en 2016 lo consideró como “el mayor aporte cultural de la TV chilena”.

Da para pensar que una persona culta, con formación académica de élite e intelectualmente potente haya terminado hablando de pseudociencias y conspiraciones, promoviendo el discurso antivacunas en plena pandemia e ideas polémicas como que “el SIDA no existe”, que dio pie a sendos reclamos en su contra ante el CNTV.

A la fecha han sido pocos, marginales y muy desprestigiados los parlamentarios que han enarbolado discursos de este tipo: el ultra-funado Florcita Motuda y la socialista Jenny Álvarez, que a inicios de 2022 se contagió de COVID, mandó a cuarentena a su bancada completa y defendió de manera patética sus posturas en televisión.

Sin embargo, esto puede cambiar a partir de marzo de 2026. Aparte de la llegada del Doctor File, el próximo Parlamento tendrá importante presencia de los partidos Republicano y Nacional Libertario, proclives a este tipo de discursos y que han apoyado públicamente a gobiernos con clara impronta seudocientífica como Jair Bolsonaro en Brasil y Donald Trump en Estados Unidos, que tiene como secretario de salud a un notorio antivacunas como Robert F. Kennedy Jr. Cabe preguntarse cuál sería la política sanitaria de un eventual gobierno de José Antonio Kast. ¿Qué hará con el exitoso sistema nacional de vacunas? ¿Prestará oídos al Doctor File y a sus partidarios proclives a estos discursos?

Ya no serán un par de loquitos o “frikis” sueltos los que defiendan estas ideas. Se puede armar una “bancada seudocientífica”, de la cual el Doctor File sería un líder con la preparación intelectual y talento mediático suficientes como para que esas peligrosas ideas ganen peso en la discusión pública y se traduzcan en decisiones funestas para el país.