Los arrebatos de Evelyn Matthei en 24 horas

Las últimas 24 horas no han sido buenas para la candidata Evelyn Matthei. Todo comenzó luego de que arremetiera contra la ministra vocera de gobierno, Aisén Etcheverry, pidiéndole que "se quede callada alguna vez". Esto, tras la polémica generada por el anuncio presidencial de cambios en el penal de Punta Peuco.

La propuesta fue duramente cuestionada por Matthei, quien aseguró que, de llegar a La Moneda, revertir la decisión "no costará nada".

El exabrupto de la candidata UDI tuvo lugar durante la inscripción de su precandidatura presidencial, donde le envió el mensaje a la vocera: “Yo le pediría a la vocera que se quede callada alguna vez (…) y ojalá se dedique a la ciencia, porque como vocera, pucha que lo ha hecho mal”.

Críticas cruzadas 

En entrevista con Tele13 Radio, el presidente Gabriel Boric también cuestionó el actuar de Matthei, advirtiendo que “la arrogancia es muy mala consejera”.

“Fue una falta de respeto. Creo que la humildad es una sana consejera”, puntualizó.

Al respecto, el jefe de campaña de la abanderada de Chile Vamos, Diego Paulsen comentó la situación y aseguró que “hay cosas que se pueden hacer mejor, o hay palabras que se pueden utilizar mejor, pero mandar a callar a una vocera es una ironía”.

“Hay que entender el juego de las palabras en el contexto en que se dice y en qué situación. La vocera finalmente se desgasta solo en atacar a Evelyn Matthei y no responder a las demandas ciudadanas que hoy día tienen gran parte de los chilenos”, señaló en conversación con Radio ADN.

¿Estilo o estrategia?

El analista político Marco Moreno puntualizó que este tipo de comportamiento responden a una estrategia electoral. “Ella, en esta etapa de posicionamiento, tiene la creencia de que tiene que tratar de mantener el voto duro de la derecha detrás de ella. Por eso, usa un estilo confrontacional de comunicación política, para que el electorado de Chile Vamos no se vaya a la candidatura de José Antonio Kast.” recalcó.

Sin embargo, Moreno también advierte que, en el actual contexto -donde la gente pide mayor mesura a los candidatos-, estas acciones podrían perjudicarla. "Probablemente, antes aparecía como un hecho aislado, pero en la medida en que es una conducta repetitiva, comienza a mostrarse como parte de su estilo, y a la gente puede no gustarle o gustarle. Creo que hay una demanda de mayor moderación por parte del electorado y, por lo tanto, le puede jugar en contra”, sostuvo.

“La duda es si, después, va a poder volver a buscar el electorado moderado, una vez que ya nos estemos acercando a la elección presidencial”, dijo.

Todo queda en familia

Otro paso en falso de la candidatura ha sido la incorporación de su hermano Fernando Matthei a la campaña. Aunque desde el comando le bajan el perfil, lo cierto es que pone en evidencia algunas inconsistencias de su discurso.

A mediados del mes de mayo, fue la misma candidata quien presentó un plan anticorrupción para acabar con los “pitutos”. Francisco Undurraga (Evópoli), vocero de la candidatura, declaró que “él es el administrador de la campaña con una conocida trayectoria profesional. Aquí no es que se cruce con el nepotismo. No se le está dando un trabajo a algún pariente, se está contando con la colaboración de un profesional”.

Consultado por el rol de Fernando, el parlamentario manifestó que “no tiene por qué incidir en ningún tipo de decisión. Él tiene que administrar los gastos electorales que se generan en la campaña y velar por el orden, de tal forma de poder rendir los gastos.”

Según consigna La Tercera, no es primera vez que su hermano mayor queda a cargo de los dineros de campañas, ya que en 2013 –junto con el cargo de administrador- lideró la conformación de sus equipos. En esa oportunidad, el ingeniero civil prestó sus oficinas para que el comando realizara algunas reuniones estratégicas.