Greta Thunberg denuncia maltratos y "condiciones inhumanas" en la cárcel de Israel
La activista climática detenida en una prisión israelí tras la interceptación de la ‘Flotilla Global Sumud’, ha denunciado “condiciones inhumanas” y malos tratos. Mientras el Gobierno de Suecia expresa su “profunda preocupación”, Israel califica las acusaciones de “mentiras descaradas” y asegura que se respetan plenamente los derechos de los detenidos.
La activista climática Greta Thunberg ha denunciado las “condiciones inhumanas” en una prisión israelí tras ser detenida durante la interceptación de la flotilla Global Sumud. Según información que trasladó a funcionarios suecos, se encuentra en una celda con chinches, padece deshidratación y tiene erupciones cutáneas, además de haber recibido escasa comida y agua desde su arresto el 1 de octubre.
El Ministerio de Asuntos Exteriores de Suecia se reunió con Thunberg y ha sido informado sobre las condiciones de su detención. La organización de la misión y sus abogados denuncian un “trato vejatorio”, la negación de acceso regular a alimentos y defensa jurídica, y episodios de abuso verbal y físico a otros miembros de la flotilla. Todos los activistas están en la prisión de alta seguridad Ansar III.
El activista turco Ersin Celik, quien era tripulante de la flotilla, aseguró que las fuerzas israelíes “arrastraron a la pequeña Greta del pelo ante nuestros ojos, la golpearon y la obligaron a besar la bandera israelí”. Estas declaraciones describen una agresión directa y un trato degradante hacia la activista sueca por parte de las autoridades que llevaron a cabo el abordaje de las embarcaciones.
En respuesta, el Ministerio de Exteriores israelí ha declarado que “se respetan plenamente” los derechos de los activistas de la que califica como “la flotilla Hamás-Sumud”. A través de un comunicado en su cuenta de X, el ministerio afirmó: “Las acusaciones sobre el maltrato a Greta Thunberg y otros detenidos de la flotilla Hamás-Sumud son mentiras descaradas. Todos los derechos legales de los detenidos se respetan plenamente”.
El gobierno israelí añadió que “la propia Greta y otros detenidos se negaron a acelerar su deportación e insistieron en prolongar su estancia bajo custodia”. Además, subrayó que la activista “no presentó ninguna queja ante las autoridades israelíes sobre las acusaciones absurdas e infundadas, porque nunca ocurrieron”, negando así la veracidad de los hechos denunciados por los activistas.

Quiénes son los 12 tripulantes del barco donde Greta Thumberg iba con ayuda para Gaza
La conocida activista fue parte de la Freedom Flotilla Coalition que fue detenida por fuerzas israelíes. El ministro de Defensa de Israel, Israel Katz, criticó duramente a la embarcación calificándolo de "yate de selfies y celebridades".
Por su parte, varios integrantes de la Flotilla Global Sumud que fueron deportados a Turquía, denunciaron haber permanecido con las manos atadas a la espalda y sin acceso a agua ni comida por periodos de entre 36 y 40 horas. Algunos de ellos afirmaron que, debido a la falta de líquidos, intentaron beber agua directamente del inodoro, y corroboraron las acusaciones de agresión contra Thunberg.
La intercepción de los barcos de la flotilla por parte de la Armada israelí ocurrió el pasado jueves y viernes en aguas internacionales, a unas 70 millas náuticas de la costa de Gaza. Aunque se trata de una zona sin jurisdicción legal israelí, el Ejército de Israel mantiene patrullas navales allí y justificó la operación alegando que las embarcaciones se dirigían hacia “una zona de combate activa”.
No es la primera vez que Greta Thunberg es detenida, lo que complica su situación con las autoridades israelíes. En arrestos anteriores, la activista ya había denunciado malos tratos, incluyendo golpes, trato degradante y haber sido forzada a portar una bandera de Israel. Otros activistas que viajaban con ella en esas ocasiones relataron también privación de alimentos y agua.
El gobierno de Suecia ha manifestado una “profunda preocupación” por la situación de la activista y ha contactado a las autoridades israelíes. La ministra de Asuntos Exteriores, Maria Malmer Stenergard, declaró que siguen el caso de cerca, y la embajada sueca gestiona las comunicaciones para brindar toda la ayuda consular necesaria para garantizar el bienestar de sus ciudadanos.
Los abogados de la flotilla han denunciado que a muchos detenidos con enfermedades como cáncer, hipertensión o problemas cardiacos se les niega tratamiento médico vital. En contraste, el eurodiputado Jaume Asens afirmó que los activistas españoles “están bien” y el trato ha sido “en términos generales correcto”, aunque precisó que se encuentran actualmente incomunicados.