Gabinete en construcción: Kast frente a su primera gran decisión
Durante sus primeras semanas como presidente electo, el republicano ha trabajado en la selección de sus futuros ministros y subsecretarios, nombres que espera anunciar el próximo 15 de enero. Entre los más de 800 cargos que debe asignar de aquí a marzo, figuran nombres como Johannes Kaiser, Jorge Quiroz, José Luis Daza y Mara Sedini.
Fue el propio presidente electo, José Antonio Kast, el que se autoimpuso el 15 de enero como plazo para anunciar quiénes integrarán sus ministerios y subsecretarías. En una decisión que se ha vuelto usual entre los últimos gobernantes, el primer mes tras la elección presidencial se ha convertido en una carrera contra el tiempo para dar con los nombres precisos, fijar los tonos correctos y no dejar heridos en el camino, intentando también equilibrar el peso de los partidos que acompañan al líder.
El primer gabinete suele ser especialmente simbólico. El de Gabriel Boric, por ejemplo, estuvo marcado por la juventud de sus miembros, una fuerte presencia de mujeres y de actores de la sociedad civil que habían hecho carrera fuera de las maquinarias partidistas. Toda una declaración de intenciones respecto de su administración.
Ahora, el líder republicano podrá mostrar si mantendrá en su centro la idea del “gobierno de emergencia” centrado en soluciones, si dará el gusto a quienes empujan la “batalla cultural” o si buscará un punto intermedio entre ambas opciones. Para Kast, el reloj no se interrumpe con las fiestas y el tiempo para encajar las piezas del rompecabezas se agota.
Los nombres que suenan
El presidente electo tendrá que nombrar cerca de 800 cargos que comprenden la administración del Estado y que lo acompañarán a partir del próximo 11 de marzo, entre ministros, subsecretarios, seremis, delegados presidenciales, jefes de servicios, embajadores, cónsules y altos cargos ejecutivos.
Parte importante del cóctel que está preparando es que tendrá que integrar a sus otrora rivales en primera vuelta que le dieron su apoyo inmediato en el balotaje: Chile Vamos y Nacional Libertarios. Por lo demás, el Partido Republicano —de 6 años de vida— no goza de nombres fuertes en todas las carteras y apostaría a mantener el control en áreas clave, dejando espacio para figuras experimentadas en otros ministerios.
Según ha trascendido, la tarea de buscar los nombres estaría a cargo del ingeniero comercial Alejandro Irarrázaval, quien ha revisado los currículums de posibles candidatos para cargos dentro del Estado, aunque el propio Kast ha dicho que la decisión final pasa por él.
De acuerdo con el presidente electo, la resolución sobre quienes serán sus ministros está “bastante más planificada de lo que algunos creen”.
Algunas señales ha dado. Sus asesores económicos Jorge Quiroz y Bernardo Fontaine fueron claves en su campaña y Kast optó por mantenerlos en el comando, pese a las polémicas en que se vieron envueltos (Quiroz por su rol en diferentes casos de colusión y Fontaine por el financiamiento que recibió su fundación Ciudadanos en Acción de parte de la Asociación de AFP). Ambos suenan fuerte para la cartera de Economía, según ha trascendido.
También se supo que en su viaje a Argentina, en su segundo día como presidente electo, el republicano le ofreció a su ex asesor José Luis Daza el inédito triministerio de Economía, Minería y Energía, aunque no está claro que el economista chileno-argentino acepte el ofrecimiento, debido a que está trabajando como viceministro de Economía del gobierno de Javier Milei. De aceptar, los nombres de Quiroz y Fontaine serían considerados en Hacienda.
Asimismo, el nombre del ex presidenciable Johannes Kaiser es considerado para el ministerio de Defensa o el de Seguridad. Tras la primera vuelta el libertario fue parte importante de la campaña del republicano, aunque su nombre genera incomodidad en algunos de los miembros del futuro gobierno, particularmente entre quienes forman parten de los partidos prontos a desaparecer Evópoli, Amarillos y Demócratas.
También la actriz y periodista Mara Sedini, conocida por su participación como panelista en Sin Filtros, está siendo perfilada para la vocería de gobierno o bien la Subsecretaría de la Niñez, pues participó en el área de políticas para la infancia del grupo.
Para la Secretaría General de la Presidencia o Interior uno de los candidatos es el UDI Claudio Alvarado, quien asumió como encargado del traspaso de mando entre el gobierno de Boric y el de Kast y fue ministro de la Segpres de Sebastián Piñera. Por su parte, el republicano ex UDI Martín Arrau —quien fue jefe de campaña de Kast— figura como posible ministro de Obras Públicas.
Además, la socióloga y subdirectora de Acción Republicana, María Jesús Wulf, podría arribar al Ministerio de Desarrollo Social para abordar las políticas sociales que aplicará el futuro presidente, abarcando temas como educación, vivienda y crisis de natalidad.
Entre los otros nombres que suenan están Iván Poduje en Vivienda, Ximena Rincón en el ministerio de la Mujer, Darío Paya o Teodoro Ribera en la Cancillería, Germán Codina en alguna cartera de corte social, así como la secretaria general republicana Ruth Hurtado, la encargada del programa Carmen Soza o los ex consejeros constitucionales Beatriz Hevia, Sebastián Figueroa y Antonio Barchiesi.
Según planteó a Turno PM la cientista política Javiera Arce, con estos nombres Kast da “la señal de tratar de gobernar de forma equilibrada”. “Salvo lo de Daza, los nombres que han sonado, particularmente de Chile Vamos, también producen una sensación de estabilidad. Hasta ahora, parece algo más transversal de lo que pensábamos”, explicó.
Un difícil equilibrio político
Una de las dudas que ha persistido respecto a la conformación del gabinete del republicano es si podrá mantener un equilibrio entre el ala más tradicional de la derecha, donde estaría Chile Vamos, Demócratas y Amarillos, y el sector más radical, donde se sitúa el Partido Nacional Libertario.
Al respecto, el vicepresidente de la UDI, Eduardo Cretton, aseguró a Turno PM que “a nivel de gabinete vamos a ver ministros de la UDI, de RN y espero también del Partido Nacional Libertario. El diseño del gabinete es clave porque ordena hacia abajo: delegados, subsecretarías, especialmente Interior”. Pese a que no pudo dar más detalles sobre la conversación que llevan, sí deslizó que “probablemente Evelyn Matthei pone un ministro”.
En ese contexto, una de las interrogantes más sensibles es si el diputado Johannes Kaiser (PNL) —quien obtuvo el 13,9% en la primera vuelta presidencial, como cuarta mayoría— tendrá un rol en el nuevo Ejecutivo. En particular, ha circulado la posibilidad de que sea considerado para el Ministerio de Defensa.
No obstante, esa posibilidad es cada vez más incierta. Según se transmitió en una reunión encabezada por Alejandro Irarrázaval con dirigentes del PNL, entre ellos el secretario general Juan Antonio Urzúa y el vicepresidente Hans Marowski, se considerará como criterio el eventual parentesco de los postulantes con parlamentarios electos o en ejercicio. En el caso de Johannes Kaiser, quien dejará de ser diputado este 11 de marzo, su hermana Vanessa Kaiser asumirá como senadora para el próximo período.
Asimismo, desde la tienda libertaria también son reacios a la idea, dado su temor de que una participación en el gobierno perjudique sus opciones de volver a aspirar a La Moneda. El diputado Cristián Labbé, ex generalísimo de la campaña de Kaiser, comentó a La Tercera: “La figura de Johannes es no menos importante, por ende ayudaría mucho al Gobierno, pero también es cierto que hay un partido joven el cual necesita un liderazgo”.
Sumado a lo anterior, Axel Kaiser, hermano del ex candidato y autor del libro “Nazi-Comunismo: Por qué marxistas leninistas y nazi-fascistas son gemelos ideológicos”, señaló a Tele13 Radio que Johannes “está en una posición en la que está liderando un partido importante; tiene varios parlamentarios y si él quiere ser de nuevo candidato a la presidencia, tiene que tener cuidado de no quemarse en un gobierno como ministro”.
En su análisis dado a Turno PM, el investigador asociado de Faro UDD Rodrigo Pérez de Arce descartó problemas para “subir al mismo bote” a Chile Vamos y el Partido Republicano, dado que este último “se ha purgado de las figuras más radicales, más estridentes”. Sin embargo, el riesgo para el investigador está en si el PNL “elige el camino propio, como lo eligió José Antonio Kast en su momento”, ya que “pueden hacerle la vida bien difícil, pueden denunciarlo a él por las cosas que él no quiso denunciar”.
Por su parte, Cretton apuntó que, pese a la incertidumbre, “esperaría que todos los partidos que colaboren entiendan que hay una enorme responsabilidad compartida. Si al gobierno de Kast le va mal, no va a ser el Partido Nacional Libertario el que capitalice eso. El éxito o el fracaso es de todas las derechas. Entonces hay una responsabilidad transversal de cumplir las promesas de campaña”.
Según Javiera Arce, “de todas formas se va a tensionar el gobierno porque los republicanos no están aún acostumbrados a convivir con la ´derechita cobarde´. Me imagino lo compleja que va a ser la convivencia entre todos si en algún momento (no hace mucho) se sacaban los ojos”.
Los riesgos de un armado veloz
Armar un gabinete en tiempo récord no está exento de riesgos. A los difíciles equilibrios políticos que debe considerar, y las señales que quiera enviar a través de sus nombramientos, Kast tendrá que sumar también el chequeo de los antecedentes de los miles de candidatos que tiene para asumir los 800 cargos que debe asignar.
Durante los últimos años ha sido usual ver cómo se caen nombramientos en cosa de días, horas e incluso minutos a partir de tuits desafortunados o comentarios polémicos que no fueron considerados a tiempo.
Mauricio Rojas duró solo un fin de semana al mando de Cultura en el segundo gobierno de Piñera, luego de que reflotaran los dichos en que calificaba al Museo de la Memoria como un “montaje”. En pleno estallido en 2019, el nombre de Felipe Ward se cayó a última hora de Interior debido a antiguas polémicas, como cuando dijo que los derechos humanos “son una especie de cajero automático que usa la izquierda para sacar plata”. Y Nicolás Cataldo, que había sido anunciado oficialmente como subsecretario de Educación en marzo de 2023, fue bajado rápidamente tras viralizarse tuits antiguos en que criticaba duramente a Carabineros.
En ese sentido, Rodrigo Pérez de Arce espera que el presidente electo tenga en mente lo riguroso que debe ser el chequeo de los antecedentes de cada candidato a ministro. “Que busque figuras de tonelaje, de recorrido, que tengan años de política. Que las apuestas no sean la norma general”, explicó.
De todas formas, apuntó el investigador de Faro UDD, “más que a nivel ministerial, el gran desafío para Kast va a ser de las subsecretarías hacia abajo. En Chile el presidente tiene que designar a miles de autoridades, y la pregunta es si esas miles de autoridades van a ser chequeadas rigurosamente y si van a evitarse los problemas ahí, más que en los ministros, porque probablemente ese trabajo sea un poco más factible en el nivel ministerial”.
“Creo que incluso, más que a nivel de nombres, el desafío está en la dinámica política: saber los tiempos, los pasos, las negociaciones que se tienen que respetar; disminuir al mínimo las salidas de libreto; y desde ahí poder impulsar una agenda lo más fuerte posible, con la mayor velocidad, para mostrar eficacia en los primeros 3 meses de gobierno o, al menos, en el primer semestre”, concluyó.