"Leo Caprile, el último animador clásico": La columna de Rodrigo Vergara
"Hijo de Luis “Tano” Caprile, insigne voz radial del Gran Valparaíso, histórico de la Radio Festival y conductor de las tres primeras ediciones del Festival de Viña. Leo heredó ese sello de locutor radial porteño: buena voz y dicción, calle, simpatía y picardía sana", escribe el columnista para Turno PM.
El retorno de “¿Cuánto vale el Show?” ha devuelto a Leo Caprile a las pantallas después de un alejamiento voluntario marcado por un incendio y un ACV de los que salió bien librado. Hijo de Luis “Tano” Caprile, insigne voz radial del Gran Valparaíso, histórico de la Radio Festival y conductor de las tres primeras ediciones del Festival de Viña.
Leo heredó ese sello de locutor radial porteño: buena voz y dicción, calle, simpatía y picardía sana. Hizo carrera en el dial, destacando en Corazón, Pudahuel, Portales y Nacional, con esa recordada dupla con Charola Pizarro en pleno fenómeno Bonvallet. En 1987 despuntaba como la gran revelación de UCV-TV conduciendo “Telemanía” y como contertulio de la Católica en el “Show de Goles”.
Don Francisco se lo trajo a la capital, y con los años se transformó en un “veneciano” que pasó por todos los canales. Tuvo sus sombras: “Metro Cuadrado” de Mega -un remedo de Sábados Gigantes- y el incomprensible “País V” de Chilevisión.
Sus “peaks” fueron el “¿Cuánto vale el Show?” de 1994 y sus nueve ediciones como anfitrióndel Festival de Olmué. Es considerado “el último animador clásico”, y perfectamentepodría tener espacio en la TV actual. Le quedaron debiendo la posibilidad de emular a su padre en el Festival de Viña, rol para el que estaba preparado de sobra.