Doble cierre de campaña en la derecha: Kast vuelve al vidrio blindado y Matthei genera dudas por baja convocatoria
En Santiago, Matthei llamó a no dar por perdida la contienda y habló de un “triple empate técnico” en la derecha, mientras en Concepción Kast reafirmó que “la tercera es la vencida”. Dos cierres tensos en la antesala de las elecciones del domingo 16.
Mientras Evelyn Matthei intentaba llenar el Estadio Santa Laura en su último gran acto en Santiago, José Antonio Kast encabezaba en paralelo su cierre de campaña en Plaza Independencia de Concepción, otra vez resguardado tras un vidrio blindado. Los dos eventos se levantaron como el broche final de sus despliegues en terreno, en la antesala de las elecciones presidenciales del domingo 16 de noviembre.
En la capital, Matthei buscó exhibir unidad política y levantar el ánimo de su sector. Por otra parte, en el Biobío, Kast reforzó su mensaje de orden y seguridad, defendiendo el blindaje como una medida necesaria frente a la violencia. Así, las dos actividades quedaron conectadas no solo por la fecha, sino por la pugna por el mismo electorado en días decisivos.
Los nervios de Matthei
A eso de las 18:00 horas de este jueves, el Estadio Santa Laura comenzó a recibir a militantes de la UDI, RN y Evópoli, junto a simpatizantes de Demócratas y Amarillos. El comando de Evelyn Matthei había anunciado “el cierre de campaña más grande de Chile”, marcado por música en vivo y un ambiente que buscaba mostrar unidad en la recta final del proceso electoral.
Desde temprano surgieron dudas sobre la capacidad de llenar el recinto e igualar el despliegue de José Antonio Kast en el Movistar Arena. Aunque el comando informó que asistieron 10 mil personas, en privado varias autoridades reconocieron que el número real habría fluctuado entre 5 y 6 mil, generando presión interna por la convocatoria alcanzada.
Muchos asistentes llegaron con pelucas rubias, chalecos reflectantes y banderas en alusión al episodio de Matthei como alcaldesa de Providencia durante el estallido social, cuando dirigió el tránsito tras fallas de semáforos. Su aparición terminó con una corrida hacia el municipio que se volvió parte de los símbolos que hoy el comando usa para conectar con su electorado.
En las calles aledañas al estadio, voluntarios repartieron entradas físicas disponibles para quienes las solicitaran. La actividad exigió esfuerzos adicionales de convocatoria, especialmente luego de que los candidatos José Antonio Kast y Jeannette Jara reunieran el martes a más de 14 mil personas cada uno, instalando comparaciones inevitables en el cierre de campaña.
La situación se enmarca en un escenario complejo para Matthei. Hasta antes de la veda electoral, los sondeos la ubicaban entre el tercer y cuarto lugar, lejos de Jeannette Jara y José Antonio Kast. Esa presión la llevó a endurecer el tono de la campaña, concentrando sus críticas en el gobierno y marcando distancia del libertario Johannes Kaiser en los últimos días.
“La única que derrota a Jara soy yo”.
El acto abrió con Los Machos de la Cumbia y La Gran Mezcla, y luego intervino el alcalde de Independencia, Agustín Iglesias, cercano a la candidata opositora. La jornada incluyó la presentación de los candidatos metropolitanos del pacto que respalda a Matthei. Según el itinerario, su discurso estaba programado para las 21:00 horas, y recién una hora antes comenzó a llenarse el recinto, utilizado solo en un tercio de su capacidad.
Matthei estuvo acompañada por figuras de Chile Vamos y partidos aliados como Guillermo Ramírez, Rodrigo Galilea, Juan Manuel Santa Cruz y Ximena Rincón, además de parlamentarios y alcaldes. Entre ellos destacaron los jefes comunales José Manuel Palacios y Gustavo Alessandri, quienes habían sido cuestionados días antes precisamente por asistir al cierre de campaña de Kast.
También hubo ex autoridades del gobierno de Sebastián Piñera como Juan José Ossa y Patricio Melero. El equipo cercano a Matthei —Diego Paulsen, Carol Vargas, Juan Luis Ossa y los responsables de comunicaciones— siguió el evento desde la tribuna. El periodista Nicolás Larraín animó la previa y se reprodujeron capítulos de la franja, uno de ellos con un audio en inglés por error.
Durante su intervención, señaló: “El mayor fracaso del Frente Amplio es haber jugado con el futuro de Chile y de nuestros niños y jóvenes. Metieron la mano en las escuelas y liceos, con inexperiencia y dogmatismo. Sepultaron la esperanza de las familias. La irresponsabilidad política de este gobierno y de los dirigentes del Frente Amplio es enorme. La historia los juzgará de manera implacable”.
Matthei también mencionó su experiencia en el gobierno de Sebastián Piñera. “Tuve el honor de trabajar con el presidente Piñera, y de liderar el Ministerio del Trabajo cuando logramos que se crearan un millón de empleos en nuestro país. Sé hacerlo”, afirmó, buscando reforzar su credibilidad en gestión económica y laboral frente a un electorado indeciso.
Asimismo, se refirió al escenario en la derecha previo a la segunda vuelta. Sostuvo que “siempre he puesto el interés de Chile por sobre cualquier interés personal o de un grupo político específico. Por eso reiteradamente insistí en que debíamos hacer una primaria amplia de la centroderecha que evitara una disputa electoral agotadora y estéril. También abogué por una lista única parlamentaria para la oposición”.
Sobre el balotaje, afirmó que “hoy tenemos un triple empate técnico entre los 3 candidatos de derecha: cualquiera de los 3 puede pasar a segunda vuelta. Pero es evidente que la única que asegura la derrota de la candidata comunista de continuidad de este gobierno soy yo”.
El acto cerró con la presentación de Zúmbale Primo, la misma agrupación que dos días antes se había presentado en el evento de José Antonio Kast en el Movistar Arena.
Kast nuevamente tras el vidrio
Horas antes del discurso de Matthei, comenzó el cierre de campaña de José Antonio Kast en Plaza Independencia de Concepción, marcado nuevamente por el uso de un vidrio blindado que ya había llamado la atención del público. El fundador del Partido Republicano se dirigió a sus adherentes protegido por la estructura, repitiendo el formato que ya había utilizado en otras actividades abiertas.
Durante su discurso, Kast abordó de inmediato la presencia del vidrio. “Es increíble verlos aquí a través de este vidrio que ha generado tanta polémica. Pero déjenme decirles que en algunas ocasiones hay que tomar medidas que no quisiéramos tomar”, afirmó. Luego añadió que en la zona “ustedes han vivido el terrorismo, han vivido la opresión de esa izquierda ideológica que ataca, que agrede”.
El candidato sostuvo que la medida era necesaria y enfatizó: “Yo no le tengo miedo a nadie, los que tienen que tener miedo son los delincuentes, los terroristas. Porque tras ellos vamos a ir, los vamos a encontrar y los vamos a encerrar”.
La primera vez que Kast utilizó un vidrio blindado fue en Viña del Mar, donde se instaló una estructura que protegía de frente y costados el escenario. El tema volvió a surgir en el debate Anatel del lunes, cuando Evelyn Matthei lo emplazó diciendo: “No me escondí nunca detrás de un vidrio, lo que hice fue proteger a los vecinos”. Kast optó por no responder y reiteró que “las medidas de seguridad no se comentan, se ejercen”.
El gesto también generó críticas de otros candidatos durante sus respectivos cierres de campaña. Jeannette Jara interpretó la medida como un “temor a los chilenos”, mientras Marco Enríquez-Ominami la calificó como un intento de “manipular el miedo”. Pese a ello, Kast profundizó su mensaje y reafirmó su determinación electoral declarando: “La tercera es la vencida (…) esta es la última”.
Hacia el final del acto, Kast aseguró que no entraría “en ningún debate ni pelea chica” y afirmó que, si no avanzara a segunda vuelta, apoyaría de inmediato a quien enfrente al gobierno. También lanzó críticas a Jeannette Jara, señalando que “la candidata de la continuidad se está pasando a la oposición”, y cuestionó los cánticos contra Carabineros en su acto, asegurando: “Nosotros vamos a aplaudir a nuestros carabineros”.